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CIELO NUEVO Y TIERRA NUEVA

CIELO NUEVO Y TIERRA NUEVA




Un nuevo cielo y una nueva tierra son prometidos por primera vez a Isaías en una descripción gloriosa en el capitulo 65:17-25 pero también se muestra un cielo más glorioso y una tierra con la presencia del Dios mismo, en apocalipsis 21 1-5 y en 2 Pedro 3:12, te dice que esperes la promesa de cielos nuevos y tierra nueva

Isaías 65
17 Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento.
18 Mas os gozaréis y os alegraréis para siempre en las cosas que yo he creado; porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo.
19 Y me alegraré con Jerusalén, y me gozaré con mi pueblo; y nunca más se oirán en ella voz de lloro, ni voz de clamor.
20 No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito.
21 Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas.
22 No edificarán para que otro habite, ni plantarán para que otro coma; porque según los días de los árboles serán los días de mi pueblo, y mis escogidos disfrutarán la obra de sus manos.
23 No trabajarán en vano, ni darán a luz para maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus descendientes con ellos.
24 Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído.

Apocalipsis 21
1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.
2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.
3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.
4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.
5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.

2 Pedro 3
13 Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.
14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz.

Isaías habla de la nueva vida que tendrás en Cristo, y el Señor Jesús habla confirmando esta promesa:

Juan 17
15 No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal.
16 No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.
17 Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.

Esto es lo habla Isaías; que tú sales de un mundo de maldad, para entrar en el reino de Dios.
Parece un mundo de fantasía el que describe Isaías, un mundo que solo existe en sueños.
Pero es realidad lo que Dios tiene para ti; es más grande de lo que te imaginas y todo es para esta vida, porque las cosas que Dios tiene para su pueblo en el cielo son más maravillosas.

Juan 3
12 Si os he dicho cosas terrenales, y no creéis, ¿cómo creeréis si os dijere las celestiales?
13 Nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo; el Hijo del Hombre, que está en el cielo.

Pero es una promesa verdadera de Dios para su pueblo, porque Isaías habla de lo que Dios tiene para ti acá en la tierra, mientras que Juan describe un cielo y una tierra más maravillosa, algo que pertenece a la eternidad.

Isaías habla de cielos, Juan habla de cielo.
¿Porque?

Porque las bendiciones para todos no son las mismas, pero si estaremos todos en una tierra nueva; que es el reino de los cielos, y este ha llegado.

Una tierra y cielos donde mora la justicia y la verdad.
Este es el nuevo principio, para el que es hecho hijo de Dios.

Así, como en Génesis. 1:1 Dios creó los cielos y la tierra, ahora hay una creación para su hijo, que es nueva criatura. Que Isaías describe muy claramente. Pero que el señor mantiene describiendo constantemente en la mayoría de sus parábolas, como:
La del hijo prodigo, cuando regreso; que el padre preparo para él lo mejor.
La constante de que él decía: “el reino de los cielos a llegado”

Con esto estaba diciendo que lo que dijo Isaías se estaba cumpliendo.
Y David lo repitió una y otra vez.

Salmos 8
1 ¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra! Has puesto tu gloria sobre los cielos;
2 De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza, A causa de tus enemigos, Para hacer callar al enemigo y al vengativo.
3 Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, La luna y las estrellas que tú formaste,
4 Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, Y el hijo del hombre, para que lo visites?
5 Le has hecho poco menor que los ángeles, Y lo coronaste de gloria y de honra.
6 Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies:
7 Ovejas y bueyes, todo ello, Y asimismo las bestias del campo,
8 Las aves de los cielos y los peces del mar; Todo cuanto pasa por los senderos del mar.
9 ¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán grande es tu nombre en toda la tierra!

Salmos 108
4 Porque más grande que los cielos es tu misericordia, Y hasta los cielos tu verdad.
5 Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios, Y sobre toda la tierra sea enaltecida tu gloria.

Así como el hijo prodigo regreso destruido y fue liberado, así La primera creación ha sido liberada de su cautividad en la descomposición, y ha sido traída a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

Romanos. 8
18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza;
21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

¿Ahora quién es el que determina que tú entres a esta nueva vida?

Eres tú mismo, ya que tú eres el que tomaras la decisión de entrar. Y para entrar tienes que estar limpio y retirar todo aquello que te impide entrar.

Salmos 24
1 De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.
2 Porque él la fundó sobre los mares, Y la afirmó sobre los ríos.
3 ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo?
4 El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño.
5 El recibirá bendición de Jehová, Y justicia del Dios de salvación.
Salmos 73
22 Tan torpe era yo, que no entendía; Era como una bestia delante de ti.
23 Con todo, yo siempre estuve contigo; Me tomaste de la mano derecha.
24 Me has guiado según tu consejo, Y después me recibirás en gloria.
25 ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.

Mateo 5
29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.


Salmos 144
1 Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra;
2 Misericordia mía y mi castillo, Fortaleza mía y mi libertador, Escudo mío, en quien he confiado; El que sujeta a mi pueblo debajo de mí.

Salmos 25
4 Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas.
5 Encamíname en tu verdad, y enséñame, Porque tú eres el Dios de mi salvación; En ti he esperado todo el día.
6 Acuérdate, oh Jehová, de tus piedades y de tus misericordias, Que son perpetuas.
7 De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes; Conforme a tu misericordia acuérdate de mí, Por tu bondad, oh Jehová.

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