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ATTE: ICLV






APRENDIENDO A HABLAR 3

APRENDIENDO A HABLAR 3
ARMADOS PARA LA VICTORIA parte 2




Como vimos el domingo el campo de batalla no está afuera.
Está en tu mente.
Y lo que tú aceptes en tu mente, es lo que se manifestará afuera.

Tenemos que diferenciar entre lo que es nuestro, entre lo que nos ponen y entre lo que aceptamos.

Haciendo resumen de la primera parte
¿Qué es lo nuestro?

Una de las cosas que debemos comprender es que desde el momento que Dios nos hizo, nos hizo perfectos, ya que después que concluyo con la creación dijo

Génesis 1
31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.

Desde ese momento no queda escrito en palabra alguna; que algo nos hizo falta.
Lo que es nuestro es únicamente lo que se nos entregó en el momento que el hombre fue creado.

Pero para que todo esto se manifieste, solo lo podemos recuperar únicamente a través de Cristo; por eso todo lo que hacemos tenemos que hacerlo en el nombre de Cristo.

LO QUE NOS PONEN

¿Qué es lo que nos ponen? Una religión o a Cristo

Para comprender esto debemos entender que significa decir, hablar en el nombre de cristo.

No es gritar diciendo; en el nombre del señor Jesús. Porque si fuera así todo se cumpliría como si eso fuera una palabra mágica.

Hablar en el nombre de Cristo es tenerlo a EL porque lo que tu estas diciendo no son tus palabras sino el poder de él en ti.

Debemos entender la traducción de estas palabras “EN MI NOMBRE”

Recordemos a Moisés y Aron en los temas anteriores.

Porque no es lo mismo decir en el nombre Juan, Carlos, Pedro, vengo por una libra de carne. Cuando Carlos, Pedro, o Juan, ni te conocen. Y el que tiene la carne no te la suelta. Porque él te dirá: yo a estos conozco. Pero a usted no. Porque usted va a pedir algo en el nombre de él.

POR ESO TENEMOS QUE ENTENDER LO QUE SIGNIFICA EN MI NOMBRE.
Ya que una cosa es la que te ponen, y otra es lo que tú aceptas.

Marcos 16
17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.
19 Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios.
20 Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén.

Dice a los que cree.
¿y quiénes son los que creen?
Solo aquellos que se les ha revelado el hijo de Dios, no el hijo del carpintero.

Tres fases para poder hablar, tener autoridad y pedir en el nombre del señor Jesús.

HABLAR.
Hechos 9
15 El Señor le dijo: Vé, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel;
16 porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre.

PODER
Romanos 9
17 Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.
18 De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece.

PEDIR
Juan 16
23 En aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará.
24 Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.
25 Estas cosas os he hablado en alegorías; la hora viene cuando ya no os hablaré por alegorías, sino que claramente os anunciaré acerca del Padre.
26 En aquel día pediréis en mi nombre; y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros,
27 pues el Padre mismo os ama, porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios.


Tenemos que fijarnos que es lo que ponen en nosotros
Una copia del evangelio o el evangelio.



Romanos 1
16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.

1 tesalonicenses 1
5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros.
6 Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo,

2 Timoteo 1
8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,
9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,

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