LA LEY DE LAS OFRENDAS

LA LEY DE LAS OFRENDAS



El libro de levíticos presente perfecta y detalladamente lo que era una ofrenda verdadera, y basada no en lo que el hombre daba sino en lo que Dios exigía.

La palabra base para el libro de Levítico es santidad en lo que presentamos delante de Dios.
Dios se ocupa aquí de un pueblo a quien ha redimido de la esclavitud para llevarlo a una relación perfecta con base a un pacto (el cual es el señor como ofrenda perfecta).

Por eso la perfección de una ofrenda no está basada en lo que damos sino en que si esa ofrenda cumple con los requisitos exigidos por Dios.

Hebreos 10
1 Porque la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan.
2 De otra manera cesarían de ofrecerse, pues los que tributan este culto, limpios una vez, no tendrían ya más conciencia de pecado.
3 Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados;
4 porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.
5 Por lo cual, entrando en el mundo dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste; Mas me preparaste cuerpo.
6 Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron.
7 Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de mí.
8 Diciendo primero: Sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley),
9 y diciendo luego: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último.
10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.
11 Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados;
12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,


Por eso al leer el libro de levíticos leemos que Dios habló a Moisés, y encontramos detalles de lo que él mandó.

El libro de levíticos con relación a una ofrenda lo podríamos dividir de esta manera:

1. Los tipos de ofrendas
2. La ley de las ofrendas o las ordenanzas
3. Quien presentaba la ofrenda. (Solo era el sacerdote)
4. Los requerimientos de santidad del sacerdote para presentar la ofrenda
5. El origen de la ofrenda
6. La perfección de lo ofrenda.
7. El respeto por la ofrenda dada
8. El cambio de vida de quien da la ofrenda



1- Los tipos de ofrendas
Se clasificarían en dos tipos que son:
Las de olor fragante, y las ofrendas por causa del pecado.
Las de olor fragante son las de agradecimiento por causa de lo que Dios ha hecho en nuestra vida. Tales como la ofrenda de la alabanza la ofrenda de tiempo y la ofrenda de frutos tanto materiales como espirituales.

Y las ofrendas por causa del pecado para nuestro tiempo es la ofrenda del arrepentimiento, puesto que Cristo fue la ofrenda por el pecado de nosotros.

Que está entre los capítulos 1 al 6 del libro de levíticos.




2- La ley de las ofrendas
Son las leyes relacionadas con el cuidado al presentar una ofrenda resguardando la misma ofrenda contra la introducción de errores en la misma ofrenda, y el cuidado de la entrada de idolatría por causa de la misma ofrenda.

Algo que queda muy claro es que ni Moisés ni Aarón inventaron estas leyes, sino que fueron leyes dadas por Dios mismo.

Dios nunca dejó que el mismo pueblo decidiera el proceso de una ofrenda para él.
Ya que las ofrendas no perfeccionar al ofrendante. Solo es un símbolo de lo que verdaderamente hay en el corazón de la persona. Y de la libertad que tiene.

Traemos ofrendas, no gobernadas solo por reglamentos, sino que son consecuencia del amor que fluye en cada uno de nosotros por causa de la verdadera ofrenda que hiso el señor por causa de nosotros.

Entonces la ley de la ofrenda comienza presentando nuestros propios cuerpos.

Romanos 12
1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Esta es una ofrenda viva en contraste con aquellos animales muertos que se presentaban en el antiguo testamento ya que antes yo presentaba a algo como ofrenda mas ahora soy yo quien debo presentarme como ofrenda. Antes se enviaba la ofrenda ahora no podemos evadir la responsabilidad ya que Dios no quiere que tu envíes una ofrenda, él quiere verte a ti como la ofrenda que está delante del altar.

Luego viene la ofrendad de nuestra alabanza,



Hebreos 13
15 Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.

Dice claramente “labios que confiesan su nombre”.
Nuestra manera de hablar, cual fruto u ofrenda de labios es; ya que esta debe testificar a Cristo, no sólo en las reuniones de una congregación, sino en el hablar diario.

Y por último la ley de las ofrendas de nuestros bienes. Y esta es la que más daño a hecho al pueblo de Dios ya que enviamos o entregamos nuestros bienes no como ofrenda sino como quien hace con esa ofrenda lo que quiere por cuanto se considera dueño de ella. Cuando Dios dio órdenes muy claras de cómo y a donde se deben presentar las ofrendas. Esto es comparable como la ofrenda de alabanza; que no ba a ir a una taberna a adorar a Dios y presentar allí su ofrenda.

Marcos 12
14 Viniendo ellos, le dijeron: Maestro, sabemos que eres hombre veraz, y que no te cuidas de nadie; porque no miras la apariencia de los hombres, sino que con verdad enseñas el camino de Dios. ¿Es lícito dar tributo a César, o no? ¿Daremos, o no daremos?
15 Mas él, percibiendo la hipocresía de ellos, les dijo: ¿Por qué me tentáis? Traedme la moneda para que la vea.
16 Ellos se la trajeron; y les dijo: ¿De quién es esta imagen y la inscripción? Ellos le dijeron: De César.
17 Respondiendo Jesús, les dijo: Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios. Y se maravillaron de él.

Ahora como bien dice “Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios” pero lo del cesar no lo va a llevar al templo ni lo de Dios al cesar.

3- Quien presentaba la ofrenda. (Solo era el sacerdote)
El único que estaba autorizado para presentar ofrendas era el sacerdote habiendo una diferencia entre el sumo sacerdote y los sacerdotes. Esto en representación de Cristo y sus redimidos. Ya que en aron hubo primero el aceite y luego el sacrificio mientras que en sus hijos fue al contrario. Lo cual lo pueden leer en el capítulo 8 de levíticos.

1 pedro 2
5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
6 Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; Y el que creyere en él, no será avergonzado.
7 Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen, La piedra que los edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ángulo;
8 y: Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados.
9 Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
10 vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.


4 Los requerimientos de santidad del sacerdote para presentar la ofrenda

Moisés había llevado a cabo la consagración de los sacerdotes en el capítulo 8 de levíticos.
Pero de ahora en adelante Aarón y sus hijos tienen que asumir las responsabilidades que les fueron asignadas si querían seguir presentando una ofrenda que fuera aceptada por Dios.
La gloria de Dios será manifestada solamente al haber un verdadero sacerdote que la presenta.
Por eso cuando estamos teniendo un sacerdocio conforme a la palabra; esa ofrenda adquiere sentido delante de Dios, y por lo tanto se verá manifiesto en esa vida.

Un ejemplo sencillo es el arrepentimiento verdadero; cuando esa ofrenda es real, se manifiesta inmediatamente el cambio en aquella vida.
Juan 14
23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.
24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.
25 Os he dicho estas cosas estando con vosotros.
26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.


5- El origen de la ofrenda

Fuego extraño
Los primeros versículos del capítulo diez presentan un gran contraste con los últimos del capítulo 9. Allí, por cuanto se había hecho todo conforme el Señor mandó, el fuego de Dios cayó y consumió la ofrenda, y el pueblo “alabaron, y se postraron sobre sus rostros”.
El suceso trágico del capítulo 10.1,2 (“que ofrecieron a Dios fuego extraño”) sigue de inmediato dolor, en un día que tendría que ser de alegría y de regocijo.
¿Por qué sucedió esto?
Porque se había entregado una ley muy clara con relación a las ofrendas y sacrificios

Por eso no podemos traer ofrenda de ganancias deshonestas, ni siquiera del tiempo al cual nos hemos comprometido en otro lado, como por ejemplo el horario de trabajo.

Levítico 10
1 Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, y pusieron en ellos fuego, sobre el cual pusieron incienso, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó.
2 Y salió fuego de delante de Jehová y los quemó, y murieron delante de Jehová.
3 Entonces dijo Moisés a Aarón: Esto es lo que habló Jehová, diciendo: En los que a mí se acercan me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado. Y Aarón calló.
4 Y llamó Moisés a Misael y a Elzafán, hijos de Uziel tío de Aarón, y les dijo: Acercaos y sacad a vuestros hermanos de delante del santuario, fuera del campamento.
5 Y ellos se acercaron y los sacaron con sus túnicas fuera del campamento, como dijo Moisés.
6 Entonces Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar e Itamar sus hijos: No descubráis vuestras cabezas, ni rasguéis vuestros vestidos en señal de duelo, para que no muráis, ni se levante la ira sobre toda la congregación; pero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, sí lamentarán por el incendio que Jehová ha hecho.
7 Ni saldréis de la puerta del tabernáculo de reunión, porque moriréis; por cuanto el aceite de la unción de Jehová está sobre vosotros. Y ellos hicieron conforme al dicho de Moisés.
8 Y Jehová habló a Aarón, diciendo:
9 Tú, y tus hijos contigo, no beberéis vino ni sidra cuando entréis en el tabernáculo de reunión, para que no muráis; estatuto perpetuo será para vuestras generaciones,
10 para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio,
11 y para enseñar a los hijos de Israel todos los estatutos que Jehová les ha dicho por medio de Moisés.

Y es lo mismo que sucede con muchos que ofrendan de una manera equivocada e impulsiva, que solo son inspirados por un entusiasmo causado por consumir sidra,

En el versículo 9 dice que buscaron impulsivamente sus incensarios y actuaron como “Jehová nunca les mandó. Adicionalmente, no actuaron conforme a una ley divina ya establecida.

Nadab y Abiú habían tenido el privilegio de ver la gloria del Señor en el monte, pero tristemente perdieron el orden de aquella visión y ahora solo hacían su propia voluntad

Ya que los mismos privilegios conllevan también mucha responsabilidad.
Pese
Por eso mismo dice las palabras del verso. 3: “En los que a mí se acercan me santificaré”.


6- La perfección de lo ofrenda.
Es muy importante aprender de manera enfática que como dice el salmo 93 “la santidad conviene a tu casa”,
Salmo 93

4 Jehová en las alturas es más poderoso Que el estruendo de las muchas aguas, Más que las recias ondas del mar.
5 Tus testimonios son muy firmes; La santidad conviene a tu casa, Oh Jehová, por los siglos y para siempre.

Y esta norma sigue vigente.
“Como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir”,

1 Pedro 1
14 como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia;
15 sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir;
16 porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
17 Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación;

“tenemos que hacer diferencia entre lo inmundo y lo limpio.

Porque una ofrenda solo es perfecta cuando la ofrenda comienza desde el mismo ofrendante

Dios se interesaba aun por lo que tocaban. Eran inmundos con tocar los cuerpos muertos de las criaturas, y debían ser evitados. Por eso tu no puedes traer una ofrenda muerta.
Ciertamente, “Yo soy Jehová… por tanto os santificaréis”, y, “Os hago subir de la tierra de Egipto … seréis, pues, santos”, v 44,45. Del capítulo 11

El mensaje es claro; Dios es santo. Esto nos impone una obligación a ser cómo Él es.

7- El respeto por la ofrenda dada
El respeto solo se basa en la actitud con la cual se ofrenda tanto en la ofrenda de nuestro tiempo en una congregación como también en lo emocional y lo espiritual que es la albanza.

2 corintios 9
7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra;
9 como está escrito: Repartió, dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre.
10 Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia,
11 para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios.
12 Porque la ministración de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta, sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios;
13 pues por la experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia que profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución para ellos y para todos;

1 corintios 11
29 Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.
30 Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen.


8- El cambio de vida de quien da la ofrenda

La separación de los sacerdotes en el pueblo de Israel se divide en dos antes de y luego de.
En el antiguo se la llamaba al sacerdote a ser santo. Pero en el nuevo se le llama real sacerdocio. Sacerdocio santo y a la vez sacerdocio real.

1 Pedro 2.
5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
9 Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;

El propósito de esto es el de primero ser puesto aparte para luego enseñar o dar de lo que primero dimos.