MILITANDO COMO SOLDADO parte 6

MILITANDO COMO SOLDADO parte 6
La vida de los apóstoles





2 Timoteo 2
4 Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado.
5 Y también el que lucha como atleta, no es coronado si no lucha legítimamente.
6 El labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero.
7 Considera lo que digo, y el Señor te dé entendimiento en todo.

FELIPE: El apóstol práctico

Siempre cauteloso, con sumo cuidado, sabía conquistar el terreno paso a paso, lleno de sentido común, meticuloso.
Felipe no busca a Jesús como otros discípulos; era demasiado práctico y no iba a creer en cualquier movimiento religioso.
Cuando habla, plantea cuestiones prácticas y exige respuestas también prácticas:

Juan 6
7 Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco.

Juan 12
22 Felipe fue y se lo dijo a Andrés; entonces Andrés y Felipe se lo dijeron a Jesús.

Juan 14
8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.
9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?

La víspera de su muerte, Jesús lo reprocha porque aún no lo conoce y se le revela como "el camino" para llegar al Padre, la verdad y la vida. Porque el camino no es el conocimiento solo, ni es la verdad



Felipe conoce al señor no por lo que él es, sino por el estudio que tiene de él.
Y debido a que las expectativas de él se habían cumplido debido a los estudios que el tenia se manifiesta el entusiasmo de conocerlo y de que otros lo conozcan, pero lo que él quiere es mostrar con su entusiasmo, es lo que él sabe de Cristo más no por lo que Cristo es

v45-46. Felipe fue a buscar a Natanael y le dijo: «Al descrito por Moisés en la Ley, y por los Profetas, lo hemos encontrado: es Jesús, hijo de José, el de Nazaret».
Natanael le replicó: «¿De Nazaret puede salir algo de calidad?» Felipe le contestó: «Ven a verlo».

Se nota un claro conocimiento de Felipe asía el señor Jesús pero cuando lo describe como el hijo de José se pierde toda realidad de quien verdaderamente tiene al frente, que es al hijo de Dios.

Por eso es que cuando Natanael su primer discípulo le contesta con saldrá algo bueno, él no se desanima pero no lo hace es porque se basa es en lo que él sabe de el por medio de la ley y los profetas.

La Reacción entusiasta de Felipe; no se conforma con haber conocido a Jesús, tiene que comunicarlo. Va a buscar a Natanael y le describe a Jesús como la realización de lo predicho en todo el AT, tanto por Moisés, como por los profetas.

Felipe vive dentro del mundo del AT, y, como no ha escuchado el testimonio de Juan Bautista, no se da cuenta de lo que verdaderamente representa tener un encuentro con el señor Jesús.

Su idea de Mesías y su perspectiva de salvación se basa es en la ley para encontrar la plenitud de conocimiento (Al descrito por Moisés en la Ley, y por los profetas, lo hemos encontrado). Más no una nueva vida.

Por eso lo que el señor Jesús hizo no se limita a renovar la elección un pensamiento o conocimiento. Por eso el señor Jesús le dice a Natanael que el vera cosas más grandes, que la experiencia de verlo por medio de lo que se sabe de él no es nada porque una cosa es tener la ley, y otra es tener la vida, pero no centrada en el Mesías-rey de Israel, sino en el Mesías-Hijo del hombre.

Sin nombrarse a sí mismo, Jesús hace la primera declaración sobre su persona.

Afirma que los suyos serán los que disfrutaran de la plena y permanente comunicación con el Dios todo poderoso.
Alude al sueño de Jacob en Betel, en el que vio una escala o rampa apoyada en la tierra y que llegaba al cielo (Gn 28,11-27). Ahora, la comunicación permanente entre los hombres y Dios va a verificarse a través del Hijo del hombre, del Hombre-Dios (el portador del Espíritu).
Por eso mientras que nosotros tengamos un conocimiento solo en letra de quien es el hijo de Dios no podremos disfrutar de lo que verdaderamente hay para los que le conocen en espíritu y en verdad.

Luego viene un encuentro entre Felipe y Natanael. Y le dijo felipe: hemos hallado a aquél de quien escribió Moisés en la Ley, y los profetas, a Jesús de Nazaret..


Natanael dijo algo que la mayoría de cristianos dice
Juan 1
46 Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve.

Que quiero decir con esto.
Es que la mayoría dice lo mismo saldrá algo bueno de ir a buscar de Dios. De congregarme.

Pero luego viene la mentalidad de Felipe el cual conoce al señor por letra y no por espíritu.
Los hombres de todos los tiempos se han preguntado una y otra vez por la felicidad, aunque tal vez nunca comprendieran qué es realmente eso de la felicidad.

Y se han dedicado siempre a buscarla por todos los conductos y todos los medios humanos más no espirituales.
El hombre con una mentalidad como la de Felipe ha elaborado teorías que no llevan a nada, por eso la teoría de la vida fácil, la teoría del estudio de la filosofía, la teoría del dinero, la teoría de la fama, ni el progreso, ni muchas otras cosas son capaces de llenar el corazón infinito del hombre.


Pero también Es a Felipe a quien recurren los extranjeros.
Felipe es el de las relaciones abiertas. En cierto modo, quizás haya sido el encargado de al menos una parte de las “relaciones públicas” de los doce. Pero, además, Felipe es el apóstol de la amistad. Debido a su conocimiento, disciplina y entusiasmo en estar preparado para todo tipo de encuentro, puede llegar a donde otros no llegarían, pues él tiene lo necesario para desenvolverse en un mundo fuera del grupo de ellos.

Lo ven como un amigo ya que los que venían de otro lado encontraban en el a alguien que les entendiera su forma de hablar. Y como él tenía el conocimiento para hablarles en el mismo idioma de ellos lo consideraban otro más del mismo pueblo.
Es un amigo de los amigos y un nexo con los extraños. Cuando Jesús lo llama, no necesita de grandes instrucciones. En cierta forma Felipe parece sencillamente estar allí. Porque el señor le dice Un buen día: “¡Sígueme!”. Y Felipe le siguió. Porque a pesar del conflicto que había en el por la nueva vida en Cristo donde ya nada estaba en el control de él, simplemente lo siguió.

Lo cierto es que le siguió hasta la muerte. Después de la crucifixión estará en Escitia, en Lidia y llevará su apostolado hasta Frigia. Allí, en la ciudad de Hierápolis, terminará sus días crucificado cabeza abajo y lapidado.