LLAMAMIENTO MINISTERIAL-parte 2 -COMO SE HACEN LAS COSAS EN EL CIELO

COMO SE HACEN LAS COSAS EN EL CIELO




Romanos 6
19 Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia.
20 Porque cuando erais esclavos del pecado, erais libres acerca de la justicia.
21 Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las cuales ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte.
22 Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.
23 Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

Tu ministerio tiene que hacerse como se hacen las cosas en el cielo.

No esperes llegar a una tierra creada, crea la tierra a dónde quieres llegar. Génesis 1
Pero esa tierra será de acuerdo a la palabra que escuches.

Porque de nada te sirve recibir al señor en tu corazón sino piensas escucharlo, al igual que hizo Martha

Lucas 10
38 Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Martha le recibió en su casa.
39 Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra.
40 Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.
41 Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.
42 Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.

Juan 11
5 Y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro.

Sacerdote es el que SABE que tiene pleno acceso a DIOS.

Mientras que no comprendas tu relación con Dios, siempre actuaras como Martha.
Y no entenderás la hermosura del compromiso que tienes con Dios.

Una persona puede ser discípulo de Jesús pero no creer en él.
Al igual que Martha; llegar a creer que ellos son los que saben hacer las cosas.
Pero todo esto sucede, cuando no hacemos las cosas como se hacen en el cielo; y en el cielo solo se hace la voluntad de Dios nada más.

Juan 2
5 Su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere.

Muchos piensan que por llevar años en las actividades con lo referente a Dios, creen que eso les asegura que ellos están creyendo y haciendo todo como a Dios le agrada.

Juan 7
38 El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.

Pues mientras que tú no creas como dice la escritura, así mismo enseñaras a otros.

Hay muchas formas en que la gente cree en Dios, inclusive dentro de las congregaciones, pero hay una forma de creer, que sólo es revelada por el Espíritu Santo en la Escritura.

Por eso debemos hacer específicamente lo que él quiere y como él lo quiere.
Pero para eso debemos verificar, si estamos plenamente comprometidos con lo que es verdadero y no con lo que creemos que es verdadero.
El mundo y muchos cristianos creen en Dios, pero desde el punto de vista religioso, a lo lejos, o a través de ritos y de prácticas que sólo satisfacen a los hombres y a sus vanas conciencias, pero no a Dios.
Romanos 6
19 Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia.

Creer en Dios es igual a compromiso con Dios, nunca se hará nada por algo o por alguien con lo cual no estamos comprometidos.

Hay dos formas de compromiso, de acuerdo al estatus que tenemos:
Son como reyes, o como ministros. O también combinado
Ya que todos somos reyes y sacerdotes, porque todos tenemos que ejercer o gobernar como reyes en la tierra que Dios nos ha entregado, pero también como sacerdotes ya que todos tenemos que ser olor fragante ofrecido delante de Dios.

Pero ya en el ámbito de función
Como reyes son aquellos que se les da el don, el talento de formar empresas, crear diseños, ser médicos, etc.

Como sacerdotes llamados al ministerio son aquellos que se les da el don de servir en la obra como apóstoles, pastores, maestros, evangelistas, profetas.

Pero para cualquiera de estos, se requiere verdadero compromiso.

¿Pero cuándo se adquiere un verdadero compromiso?

Cuando se está dispuesto a llegar al matrimonio, con aquello que crees que será para toda la vida.

Satanás sabe, que si hace pedazos el concepto compromiso, estará dando un paso importante para privarte de muchas recompensas con Dios,
Un compromiso con Dios es igual que el matrimonio, ya que el matrimonio y el compromiso es un fiel ejemplo de su significado; COMPROMISO PARA CON DIOS.

Tenemos que aprender, la diferencia que existe entre un compromiso de novios y un compromiso de esposos.

Cuando eres novio o novia, estás de visita algunas veces a la semana y los encuentros son toda risa y alegrías, besitos, cariñitos.

En la iglesia es similar, se viene algunas veces a la semana, es todo sonrisa, es todo lindo, se ve lo mejor, no hay defectos, es todo color de rosa, total luego el novio se vuelve a su casa.

La desventaja es, que por más que sean novios, este nivel de compromiso no procrea, no puede dar a luz hijos, no se puede en este estado dar a luz, por más palabras, promesas, y otras cosas que suelen decirse durante el noviazgo no existe suficiente compromiso como para expresar una verdadera entrega, que no solo da a luz una familia sino que forma una familia unida y con destino de reino.

Por eso el estado del matrimonio y compromiso es lo único que puede expresar a ciencia cierta lo que Dios pide de nosotros, un pacto, un contrato, un apego, una unión tan fuerte que sea irrompible, que sólo la muerte pueda romperla, aunque en el caso de nuestra relación con Dios, ni aún la muerte puede separarnos.
Así como Dios se comprometió con nosotros desde antes de la fundación del mundo y hasta el día de hoy su compromiso ha sido fiel a pesar de las diferentes circunstancias por la que ha atravesado esta relación.

Romanos 8
35 Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
36 Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero.
37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.