LLAMADOS A LIBERTAD

LLAMADOS A LIBERTAD



Galatas 5:13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.
Todos buscamos vivir en libertad, nadie quiere que les imponga leyes, o reglas, cada quien desea pensar y actuar a su manera.
Nuestro estilo de vida refleja a quien estamos obedeciendo, en este mundo somos esclavos de quien servimos, sea Dios o el diablo a alguien que controla nuestra vida.
Las personas drogadictas, alcohólicas, y que practican toda clase de vicio son esclavas de satanás, porque están obedeciendo al pecado que el enemigo les ha impuesto.
Cuando una persona persiste en practicar ciertos pecados, pierden el control sobre sí misma. Hasta llegar al punto de que le queda muy difícil tomar la decisión de alejarse del mismo.
Juan 8:34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.
El hombre sin cristo es un adicto de la naturaleza pecaminosa, un adicto que no puede controlar sus pensamientos y acciones.
Por lo tanto el único que nos puede hacer libres de toda maldición y de todo pecado es cristo.
Juan 8.36 Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
El que vive siguiendo la vida de cristo es el único que puede ser libre. Debemos mantenernos en esa libertar para no volver a caer en esclavitud.
Gálatas 5: 1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.
La libertad de cristo no consiste en vivir una vida religiosa, consiste en vivir una vida amando a Dios, en santidad, viendo en los frutos del espíritu santo, gozando de la libertad que cristo nos da, disfrutando cada cosa con amor.
Así como los judíos pretendían imponer la ley en el cristianismo, viviendo nuevamente una vida de esclavitud, donde nadie pudo cumplir esa ley, los judíos creían que solo con la ley se podría vencer la vida de pecado.
Para los judaizantes y para algunos creyentes judíos inmaduros. Pablo era un libertino que se oponía a la ley, ellos no se daban cuenta que convertirse en cristiano es tener la misma naturaleza de cristo y la presencia del espíritu santo morando dentro de nuestro interior, para poder cumplir la ley, solo el espíritu santo nos puede dar la fortaleza para cumplir su palabra y hacer su voluntad.
Existen dos corrientes en las que el que se dice ser cristiano pretende vivir, su vida y someter su libertad.
EL LEGALISMO Y EL LIBERTINAJE
EL LEGALISMO. Tomar una declaración bíblica, sean preceptos, prohibiciones y establecer leyes que rigen el comportamiento de una persona.
Es la religión de los logros humanos, cree que la espiritualidad se conforma por las leyes creadas por los hombres, cree que la espiritualidad no se basa solo en cristo, sino en las obras y en el cumplimiento de normas, ritos y sacrificios.
El legalismo esclaviza y pretende someter la carne por medio de las obras de la ley.
El legalismo crea una máscara de conformismo, que hace creer al creyente que es santo, que debe esforzarse en cumplir normas, pero en realidad nunca puede conocer el amor de cristo.
En tiempos de Pablo los legalistas querían imponer sus normas sobre los gentiles que aceptaban a cristo queriendo que ellos se circuncidaran como lo judíos según la ley de Moisés.
El creyente nacido de nuevo esta completo en cristo, quien nos ha dado salvación, y ha perdonado todos nuestros pecados; por lo tanto el verdadero creyente no sacrifica su libertad sometiéndose a esclavitud impuesta por reglas humanas, sino que vive una vida conforme a cristo.
Romanos 10.4 porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree.
El apóstol Pablo habla a la iglesia de los gálatas y les dice
Gálatas 5:1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud
El legalismo es ineficaz porque no puede refrenar la carne, es como los fariseos por fuera se muestran limpios pero en su interior están podridos.
Una de las preocupaciones de Pablo era que el cristiano no cayera en el legalismo por eso le escribe a Tito.
Tito 1:14 No atendiendo a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad.
15 Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas.
16 Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.
EL LIBERTINAJE
Es cuando el creyente confunde su libertad de la esclavitud de la ley con el supuesto permiso o derecho para vivir indisciplinadamente.
Como cristianos no somos esclavos de la ley, pero debemos evitar ser esclavos de los apetitos y deseos carnales.
El creyente debe mantener un estilo de vida puro, viviendo en santidad.
1 de Pedro 1:15. Sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir;
16 porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
El propósito de nuestra vida cristiana debe ser siempre el de agradar al señor en toda nuestra manera de vivir.
1 de Corintios 10:31. Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.
32 No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios;
33 como también yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos.
La libertad que cristo nos dio no sebe ser ocasión para vivir una vida en libertinaje, siguiendo nuestros propios deseos conforme al mundo.
Gálatas 5:13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros
Una vida en libertad la podemos vivir y disfrutar solo por medio de cristo, así seremos libres de la esclavitud del pecado.
Dios no nos impone leyes para obedecerle y poder vivir en santidad, la obediencia solo se basa en el amor, cuando amamos podremos obedecerle con todo el corazón.
Lo único que pueden poner respeto y pasión por las cosas de Dios es ese amor, esa es la libertad a la que cristo nos ha llamado.
LOS PROPOSITOS DEL LLAMADO A LA LIBERTAD
Galatas 5:13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.
5:14 Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
-NO USAR LA LIBERTAD COMO OCACION PARA LA CARNE
La libertad del evangelio no es tolerancia ni permiso para pecar, no es el medio para satisfacer los deseos de la carne sino que debe ser para oponerse a ellos.
La libertad cristiana no debe usarse para cometer cualquier clase de pecados, sin tener en cuenta las consecuencias.
Dios nos dio la libertad, no para hacer lo que nosotros queremos sino para hacer las cosas que Dios quiere que hagamos por amor a él.
1 de pedro 2:16 como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios.
Los falsos maestros pretenden convertir la libertad que cristo nos dio para vivir en libertinaje.
Judas 1:4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.
-SERVIR UNOS A OTROS
Cristo nos hace libres para poder servir los unos a los otros en amor.
Filipenses 2:5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,
2:6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,
2:7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;
2:8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz
El señor nos enseñó el mejor ejemplo de humildad, para que nosotros también lo practiquemos.
-CUMPLIR LA LEY MORAL DE DIOS
La libertad cristiana no es una licencia para ignorar la santidad que debemos tener como hijos de Dios. Debemos ser santos como Dios es santo, hacer siempre lo correcto lo que agrada a Dios.
Dios nos llama a servirle y obedecerle solo por amor.
Mateo 22:36 Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley?
22:37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
22:38 Este es el primero y grande mandamiento.
22:39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Si amamos a Dios, también amaremos a nuestro prójimo y cumpliremos con la ley del amor.
Romanos 13:8 No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.
13:9 Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
13:10 El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.
La libertad verdadera basada en el amor produce en el cristiano, dominio propio, servicio a los demás y obediencia a Dios.