PODER ESPIRITUAL

PODER ESPIRITUAL



Salmos 51
23 El que sacrifica alabanza me honrará; Y al que ordenare su camino, Le mostraré la salvación de Dios.

Juan 14
12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre.
13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.

La mayoría o muchas de las cosas que verdaderamente aprendemos del poder que tenemos en el mundo espiritual se deben a un aprendizaje accidental y no al orden con que se mueve ese mundo. Ya que todo mundo sea físico o espiritual tiene reglas muy claras, y se mueve en esas reglas.

Y todo se debe a nuestra poca visión del mundo en el que nos movemos.

Como la mayoría de nosotros no hemos visto cosas sobrenaturales en el mundo físico como lo que leemos en la Biblia, tales como ser transportado como Felipe, o caminar sobre el agua como pedro, o convertir el agua en vino o ver a un manco recuperar su brazo.

Por lo tanto llegamos a pensar acerca de estos eventos como cosas que Jesús podía hacer porque es Dios, pero que personas como nosotros requeriría de una fe muy poderosa.

Pero los que hicieron cosas espectaculares que quedaron escritos en la palabra, eran simplemente como nosotros. Y que Jesús nos dio el poder para hacer esas mismas cosas, pero que muchas veces lo vemos más allá de nuestros límites.

¿Pero cuál es la razón?
Donde incluso hasta los que no tienen que ver con Dios, parecen entender el mundo espiritual y el orden en que se mueve.

Donde incluso lo que sabemos del mundo espiritual es por conocimiento teológico y no por tener el verdadero conocimiento de lo que significa movernos en el mundo espiritual. Porque ese entrenamiento la mayoría de las veces es como el de la oruga recibiendo clases de vuelo.
Sabiendo que realmente no podrá volar hasta que en ella no allá una transformación verdadera.

¿Entonces cuál es la razón para no poder vivir en ese poder espiritual?
Que tratamos de entrenar personas no cambiadas. O tratamos de entrenarnos y manejar un poder que está realmente fuera de nuestros límites.

Como la oruga que ni por entrenamiento que tuviera en vuelo; si ella no tenía alas de nada le servía todo ese conocimiento.

Por eso es que vemos no solo la palabra de Dios como narrativa, sino que aun cuando nos congregamos, vemos la palabra como una enseñanza y no como la adquisición de poder.
Es como cuando te enseñan a ganar dinero que tal vez nunca te llegue. Y por eso es que la gente se cansa de esta enseñanza. Pero algo muy diferente ocurriría si la gente va a esa reunión a recibir dinero. Ya que como sabe que recibe algo tangible, comienza a planear lo que va a hacer. Ya que el dinero como tal no sirve si no se usa, pero si se usa, da es un poder adquisitivo.

¿Entonces cuál es la razón para no poder vivir en ese poder espiritual?
NO ENTENDER PRINCIPIOS ESPIRITUALES Y LAS REGLAS DE CADA UNO.

Y ESE PODER TIENE REGLAS EN CADA ÁREA EN LA QUE NOS MOVEMOS
EN EL ÁREA O MUNDO ESPIRITUAL
EN EL ÁREA O MUNDO HUMANO (EMOCIONAL)
EN EL ÁREA O MUNDO MATERIAL

La palabra de Dios nos enseña que hay poder en el área espiritual, humana y material.
Pero lo que hace el hombre es lo contrario de lo que Dios quiere.

El hombre separa cada área mientras que Dios quiere que las aprendamos a manejar en conjunto.
¿Y porque lo hacemos?
Poe que llegamos a asumir que estas tres áreas o estos tres mundos no tienen nada que ver el uno con el otro. Y que no tienen ninguna relación entre sí mismas.

Separamos tanto todo que cuando nos enfocamos a hacer algo solo podemos ver un solo mundo, y no los tres en conjunto en lo que se material.
Y prácticamente somos ciegos a la influencia que tiene cada mundo sobre el otro.

Mateo 18
18 De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo.
19 Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.
20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

Tenemos que entender que el mundo material no es el único que existe, al igual que nosotros, no somos los únicos seres en el universo.
Hay seres angélicos que llevan a cabo los planes de Dios. Y hay otros, seres espirituales que sirven a satanás, que pelean contra Dios y sus propósitos.

Hebreos 1
13 Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?
14 No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?

Las Escrituras son claras acerca de esto cuando señalan que nosotros los que estamos en un mundo material no estamos exentos de las consecuencias o influencias de un mundo espiritual.
"no estamos luchando solo contra poderes humanos sino contra las malignas fuerzas espirituales en el mundo celestial"



Efesios 6
12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.
13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes.

Lamentablemente somos muy ignorantes tanto de las artimañas del enemigo como de los principios que gobiernan cada mundo.

Ya que cuando tratamos de interpretarlos, lo que más hacemos es separarlos.

Vamos a tratar de entender algunos de los principios de la interacción entre el mundo espiritual el humano y el material.

- Primero que todo el humano (el hombre) es el que permite la interacción de lo espiritual con lo material.

Mateo 18
18 De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo.
19 Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.
20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

Acá no dice si una casa se pone de acuerdo. Es si un hombre se pone de acuerdo.

Pero lo que si es cierto es que el hombre por sí mismo no tiene poder, el solo administra el poder que tiene dentro. El de Dios o el del enemigo.

¿Y cuáles son esos poderes?
La vida y la muerte.


Deuteronomio 30
15 Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal;

Uno da. El otro quita. Y aun que el que quita lo quita todo, el mismo nunca obtiene nada.

Ej la oscuridad aunque absorbe la luz en la profundidad aun así la oscuridad nunca obtiene nada.

Segundo: La Obtención y el Ejercicio del Poder Y La Autoridad Espirituales Por el hombre solo pueden fluir de acuerdo a la lealtad, relación y obediencia a Dios o a satanás.
Dios y Satanás pueden revestir con poder a personas, lugares y cosas.

Siempre Existirán limitaciones en lo que Dios o satanás pueden llegar a hacer en el mundo físico de acuerdo con la cooperación que reciben del hombre.

Por medio de la lealtad y la obediencia, Dios o satanás obtienen mayores derechos para controlar el mundo en el que nos movemos. Y esos derechos nosotros los entregamos de acuerdo a los Ritos, sacrificios, o entrega verdadera a cualquiera de los dos.

El mundo espiritual funciona dentro del mundo humano y cuando en nosotros se mueve tanto el uno como el otro. La muerte consumirá toda vida que Dios nos dé.

Decimos amar a Dios pero le creemos al enemigo.

Y tercero el desarrollo de una cultura determina cuanta influencia tiene lo que nos rodea. Y eso no va solamente en si tu creas o no, sino también en lo que el hombre permita que un objeto o una acción sea envestido(a) de poder (recuerda poder no es lo mismo que autoridad)

Hechos 19
11 Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de Pablo,
12 de tal manera que aún se llevaban a los enfermos los paños o delantales de su cuerpo, y las enfermedades se iban de ellos, y los espíritus malos salían.
13 Pero algunos de los judíos, exorcistas ambulantes, intentaron invocar el nombre del Señor Jesús sobre los que tenían espíritus malos, diciendo: Os conjuro por Jesús, el que predica Pablo.
14 Había siete hijos de un tal Esceva, judío, jefe de los sacerdotes, que hacían esto.
15 Pero respondiendo el espíritu malo, dijo: A Jesús conozco, y sé quién es Pablo; pero vosotros, ¿quiénes sois?
16 Y el hombre en quien estaba el espíritu malo, saltando sobre ellos y dominándolos, pudo más que ellos, de tal manera que huyeron de aquella casa desnudos y heridos.
17 Y esto fue notorio a todos los que habitaban en Efeso, así judíos como griegos; y tuvieron temor todos ellos, y era magnificado el nombre del Señor Jesús.
18 Y muchos de los que habían creído venían, confesando y dando cuenta de sus hechos.
19 Asimismo muchos de los que habían practicado la magia trajeron los libros y los quemaron delante de todos; y hecha la cuenta de su precio, hallaron que era cincuenta mil piezas de plata.
20 Así crecía y prevalecía poderosamente la palabra del Señor.





2 reyes 13
21 Y aconteció que al sepultar unos a un hombre, súbitamente vieron una banda armada, y arrojaron el cadáver en el sepulcro de Eliseo; y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies.

Santiago 5
14 Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.
15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.

2 crónicas 20
22 Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros.
23 Porque los hijos de Amón y Moab se levantaron contra los del monte de Seir para matarlos y destruirlos; y cuando hubieron acabado con los del monte de Seir, cada cual ayudó a la destrucción de su compañero.

Salmos 51
23 El que sacrifica alabanza me honrará; Y al que ordenare su camino, Le mostraré la salvación de Dios.