LAS PROMESAS DE DIOS parte 3

LAS PROMESAS DE DIOS parte 3
Cuantos tipos de promesas existen 2



En si hay dos tipos de promesas que son promesa sinceras o verdaderas y promesas falsas.
De estas dos se derivan los siguientes tipos de promesas:

Promesas de bendición y promesas de maldición
Promesas de salvación o ayuda
Promesas generosas y promesas escasas.
Promesas de dirección
Y por último promesas de gobierno.

Hoy veremos las siguientes tipos de promesas que son promesas de bendición y promesas de maldición

Estas promesas al contrario de las primeras. Estas son todas verdaderas, pero quien las activa es uno mismo principalmente.

Proverbios 3
33 La maldición de Jehová está en la casa del impío, Pero bendecirá la morada de los justos.

Esto quiere decir que este tipo de promesas tiene un carácter judicial. Por cuanto es un veredicto que se activa de acuerdo a tu comportamiento y manera de hablar.

Es lo que se conoce como la ley de la siembra y la cosecha.

Que hace la diferencia que una persona alcance o genere para su vida promesas de maldición o bendición.

La obediencia, y con esto no me refiero a si obedece o no; sino a que le obedeces; si a Dios o a los afanes y placeres de este mundo.

La cosecha de una promesa de bendición depende de cuánto te has esforzado.
Pero recuerde esforzarse no es el que hace mucho, sino el que sabe hacer las cosas bien.



Y Dios lo sabe por eso dice
Lucas 24
49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.
50 Y los sacó fuera hasta Betania, y alzando sus manos, los bendijo.

¿Y cuál es la promesa de padre?
Seremos investidos de poder desde lo alto.

Pero quienes serán envestidos de poder, cuando seremos envestidos de poder, y para que se nos da poder, y que poder es el que se nos da.

Esto lo vemos una y otra vez en la palabra desde génesis asta apocalipsis que poder se le ha dado únicamente a los esforzados y valientes

Abel se le bendijo porque se esforzó en presentar la mejor ofrenda mientras que Caín solo desfalleció su corazón.

A Abraham se le bendijo por esforzarse en obedecer a Dios. y ser valiente para aun ofrecer su hijo como sacrificio.

Noé se esforzó en obedecer a Dios construyendo un arca y recibió salvación para él y toda su familia
Tú en que te estas esforzando
En lo que Dios te mando o en lo que Dios te no te ha dicho que hagas.

Jacob se esforzó cuidando el ganado de lavan y aunque fue engañado se esforzó aun mas hasta llegar a tener a Raquel.

Génesis 31
39 Nunca te traje lo arrebatado por las fieras: yo pagaba el daño; lo hurtado así de día como de noche, a mí me lo cobrabas.
40 De día me consumía el calor, y de noche la helada, y el sueño huía de mis ojos.
41 Así he estado veinte años en tu casa; catorce años te serví por tus dos hijas, y seis años por tu ganado, y has cambiado mi salario diez veces.
42 Si el Dios de mi padre, Dios de Abraham y temor de Isaac, no estuviera conmigo, de cierto me enviarías ahora con las manos vacías; pero Dios vio mi aflicción y el trabajo de mis manos, y te reprendió anoche.

Y esta es una de las historias más completas sobre lo que significa verdadero esfuerzo para alcanzar promesas de bendición. Y está en la historia de Israel saliendo a la tierra prometida, ya que acá se ve la decisión de muchos y el esfuerzo de pocos.

Y lo curioso es que la diferencia se nota desde el comienzo de la historia cuando los príncipes de las doce tribus van a reconocer la tierra.

Unos ven su sueño cumplido y más, mientras que otros no ven algo por lo que realmente valga la pena esforzarse y arriesgar todo lo que tienen incluyendo la vida.

Por eso los que se esforzaron murieron en el desierto, pero los que verdaderamente se esforzaron recibieron poder para alcanzar su promesa.

Pero no todos los esfuerzos son del tipo apocalíptico pero si son aún más difíciles

Como el de David para solo cuidar un puñadito de ovejas al punto de aun arriesgar la vida con un león
Y eso sucede con nosotros muchas veces que no cuidamos lo poquito que Dios nos ha dado tal vez un mínimo, tal vez un ministerio de garaje porque ni de barrio llega a ser, pero si nos dieran el ministerio de bennijim así si me esfuerzo en cuidarlo.

1 Samuel 17
34 David respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada,
35 salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo hería y lo mataba.
36 Fuese león, fuese oso, tu siervo lo mataba; y este filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha provocado al ejército del Dios viviente.


Rut fue un ejemplo de que el poder para hacer grandes cosas no está en la posición que ocupa sino en la actitud de corazón que se tiene.

Rut 2
7 y ha dicho: Te ruego que me dejes recoger y juntar tras los segadores entre las gavillas. Entró, pues, y está desde por la mañana hasta ahora, sin descansar ni aun por un momento.

Rut 2
17 Espigó, pues, en el campo hasta la noche, y desgranó lo que había recogido, y fue como un efa de cebada. (25 KILOS)
18 Y lo tomó, y se fue a la ciudad; y su suegra vio lo que había recogido. Sacó también luego lo que le había sobrado después de haber quedado saciada, y se lo dio.

Ella de su esfuerzo dio a quien no había trabajado, dio porque se había saciado pero la mayoría no se sacia con nada, Dios les da un mínimo y dicen; cuando me gane el doble del mínimo ahí si te doy lo tuyo, Dios les da aún más y ellos se esfuerzan por alcanzarlo, y lo único que hacen es que ya ni tiempo les queda para DIOS.

Las promesas de bendición y maldición están frente a ti pero cada uno es el que decide cual activa ya que estas promesas son de carácter judicial.

Pablo es otro gran ejemplo el cual pocos estamos dispuestos a pagar

2 corintios 11
24 De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno.
25 Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar;
26 en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos;
27 en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez;
28 y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias.
29 Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?
30 Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad.
31 El Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien es bendito por los siglos, sabe que no miento.

Colosenses 1
29 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí.