LA FE QUE LO ALCANZA TODO

LA FE QUE LO ALCANZA TODO





No es el tamaño del soldado dentro de la pelea, sino el tamaño de la pelea dentro del soldado”.

Mateo 8
9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a éste: Vé, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.
10 Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe.

Si supiese quién soy en realidad, dejaría de comportarme como lo que creo que soy.
Y si dejase de comportarme como lo que creo que soy, sabría quién soy en realidad.

Isaías 57
10 En la multitud de tus caminos te cansaste, pero no dijiste: No hay remedio; hallaste nuevo vigor en tu mano, por tanto, no te desalentaste.
11 ¿Y de quién te asustaste y temiste, que has faltado a la fe, y no te has acordado de mí, ni te vino al pensamiento? ¿No he guardado silencio desde tiempos antiguos, y nunca me has temido?

Abraham fue el padre de la fe.
¿Pero cuál fe?

La fe de obediencia.
Esa clase de fe era la fe de la que estaba hablando aquel centurión que estaba con el señor Jesús.

Algo que hablo en estos días fue sobre Abraham y Lot.

Que una cosa es tener el poder, y otra la presencia. Pero para tener cualquiera de las dos se requiere la fe en Dios

Para Abraham la fe era la obediencia a Dios, no las riquezas que le iba a dar,
Para Lot la fe era todo lo que el obtendría si seguía a Dios.

Pero los dos honraban a Dios a su manera, como lo vemos de nuevo en María y Martha.
Lot afanado por lo material, y lo perdió todo, Abraham solo obedecía a Dios en todo lo que Él le decía, y nunca perdió cosa alguna.
Martha obsesionada por preparar cosas para el Señor, María solo por aprender para seguirle.

¿Qué sucedió en los dos casos?
Lot y Martha lo perdieron todo. Abraham y María lo que se les dio nunca les fue quitado.

Lucas 11
40 Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.
41 Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.
42 Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.

Aprender a adquirir la conciencia de las cosas que debemos mejorar se vuelve en toda una odisea para decenas de personas, porque están igual que Lot y Martha envés de estar igual que Abraham María y el centurión

Por eso Sucede que existen personas en situaciones de sufrimiento que aunque reconozcan la escapatoria de sus problemas, no asumen la actitud para salir de ellos cuando se aprende la lección.

“Si quieres aprender a vivir aprende a tomar la mejor actitud en la vida. Y esa es la actitud de la obediencia, pero esa solo se sabe que se ha adquirido cuando aprendemos a obedecer en todo a Dios.

Si quieres aprender a sonreír, sonríe. Y sonríe hoy, no mañana. Pero no sonrías hoy, sonríe ahora”

Una cosa es advertir la solución de los problemas, pero otra es aprender la lección.

por ejemplo la solución al alcoholismo es dejar de beber; Más aprender la lección es saber que el alcohol no permitirá que disfrutemos de la vida, aprender la lección es tomar la actitud de dejar de beber, asumir que esa droga líquida es un mal y decidir ahora el basta definitivo para salir del círculo destructivo del alcoholismo. Eso es aprender la lección.

Habacuc 2
4 He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe vivirá.


Todo por la obediencia.
Porque nadie obedece a algo que no cree.

Esto es como entender lo que dijeron dos hombres que están en la biblia, uno dijo; si puedes. Mientras que el otro dijo si quieres.



Marcos 9
22 Y muchas veces le echa en el fuego y en el agua, para matarle; pero si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos.
23 Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.

Mateo 8
2 Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
3 Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante su lepra desapareció.

Dios lo único que está esperando es que tu le creas a tal nivel como para llegar a obedecer a Dios con pación y no por conveniencia.

Esa es la fe que lo alcanza todo

Hechos 6
7 Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.